Es imposible hablar de la historia de la moda sin mencionar a Vivienne Westwood. Con una rutilante carrera que le ha valido un enorme respeto en la industria y fama mundial, la diseñadora británica, que cumple 80 años en abril, es toda una leyenda.
A lo largo de cinco décadas de triunfos, Westwood ha conseguido una impresionante lista de momentos verdaderamente icónicos en el mundo de la moda (una frase que no utilizamos a la ligera, ya que esta mujer prácticamente inventó el punk). Su trayectoria le ha valido el título de dama del imperio británico, pero tras 28 años de matrimonio con el diseñador austriaco Andreas Kronthaler, de 55 años, también director creativo de su firma, está claro que su exitosa unión en el plano personal y laboral también merece un gran aplauso.
El año pasado, cuando el mundo tuvo que ponerse en pausa por el coronavirus, el matrimonio siguió dando rienda suelta a su vena creativa con el activismo y la moda. Westwood, siempre dada a alzar la voz por temas en los que cree, sigue inspirándonos con sus discursos de los viernes, que comparte en su web Climate Revolution y en sus redes sociales; además de por los estilismos que luce para la ocasión, pensados y retratados por Kronthaler, claro. “Me encanta arreglarme para mi discurso del viernes”, dice Westwood. “Somos diseñadores, por lo que cada vez puedo ponerme algo diferente de nuestras colecciones y de nuestro archivo”.
Antes de presentar su colección de otoño-invierno 2021/2022 con una película que se emitió en la web de Vivienne Westwood el 6 de marzo durante la Semana de la Moda de París, hablamos con el matrimonio, algo a lo que no suelen prestarse, sobre la importancia del activismo en medio de una crisis internacional, sus obsesiones del momento y el secreto para tener un matrimonio feliz.
Vivienne Westwood: Activismo, trabajar en mi estrategia para salvar el mundo, cocinar”.
Andreas Kronthaler: Moda, limpieza, jardinería. Todas las noches damos un paseo por Clapham Common cerca de nuestra casa en el sur de Londres.
V. W.: El núcleo de la película de la colección ha sido nuestra tienda del número 6 de Davies Street (Mayfair), recién redecorada. La obra original de George Bernard Shaw se llamaba Pigmalión (1913) por el escultor griego que se enamoró de la belleza perfecta que había creado; luego la materia inerte cobró vida.