El romance estadounidense con los food trucks o furgones de gastronomía ambulante va viento en popa.
El pasado año aumentaron las búsquedas de camiones y carritos de comida en Thumbtack.com, un sitio que conecta a más de un millón de pequeñas empresas con clientes potenciales.
"Nuestro negocio de camiones de comida se ha disparado desde el año pasado", dice Vincent Marra, propietario y chef de Gotta Have It, un camión de comida en Atlanta.
Los clientes lo están contratando de 10 a 25 veces por semana para bodas, eventos corporativos y fiestas privadas. Dice que el negocio ha crecido 110% en año y medio desde su inicio.
"A la gente le gusta la novedad", explica. "Y puede ser 25% a 30% más barato que un catering completo."
Marra señala que el costo mínimo inicial para poner en marcha un negocio de camión de comida son 55,000 dólares. "Pero te recuperas en un año. Nosotros lo hicimos, pero ten en cuenta que este no es un tipo de negocio para hacerte rico rápido".
Si te especializas en la creación de jardines resistentes a la sequía, tus habilidades son hoy muy demandadas.
El Xeriscaping es un tipo de paisajismo que incorpora caminos de piedra, lechos orgánicos y plantas nativas, que utilizan significativamente menos agua.
Esta técnica es particularmente apreciada en California, donde los propietarios están luchando con una prolongada sequía, pero también es popular en otras partes del país.
Aunque las búsquedas de paisajistas ‘xeriscape’ se han mantenido estables, el número de empresarios que figuran en este servicio se ha incrementado un 92% en el último año.
Albert Sánchez es propietario de la empresa de jardinería Daka Lawn and Landscaping en San Antonio, Texas. "Tenemos trabajo contratado para las próximas cinco semanas", dijo Sánchez, que cobra de 1,500 a 2,500 dólares por trabajo.
Señala que el ‘xeriscaping’ ha despegado en los últimos años, impulsado en parte por el repunte en el mercado de la vivienda.
Además, el ‘xeriscaping’ reduce significativamente los costos de mantenimiento. "Algunos residentes que conocemos redujeron el gasto en agua de 60 a 15 dólares al mes tras aplicar xeriscaping a su jardín".
Adiós a las clases de guitarra, llegó el ukelele. Las lecciones de ukelele, un curioso instrumento de cuatro cuerdas con un sonido único, son muy buscadas en Thumbtack.
"Últimamente vemos más ukeleles en la cultura pop, en películas y anuncios. Eso despierta interés en el instrumento", comenta John May, músico que da clases de ukelele en Columbus, Ohio.
Las ventas de ukulele han crecido en los últimos años. “Es un instrumento fácil de aprender y tocar. Y es versátil. Puedes tocar con sus acordes música clásica, jazz e incluso barroca."
Además de eso, su tamaño lo hace muy portátil, puedes llevarlo a acampadas, por ejemplo.
Su costo, empero, varía. "Puedes comprar un ukelele para principiantes por unos 100 dólares. Los mejores pueden costar miles", señala May. "Si ya enseñas un instrumento, es una buena adición a tu repertorio."
El estrés y el envejecimiento están motivando a los estadounidenses a tomar clases de yoga.
Kerry Lynn, instructora privada de yoga en West Palm Beach, Florida, tiene 20 clientes a la semana desde diciembre a mayo. "Es cuando llegan para pasar la temporada", dice refiriéndose a los jubilados que se mudan al sur durante el invierno.
Ella cobra unos 60 dólares por hora. Sus clientes tienen entre 40 a 75 años de edad. "Algunos de ellos están recuperándose de lesiones y acuden al yoga. Otros son mayores y quieren mantenerse en forma y activos", explica.
Vicky Vásquez, en North Miami Beach, Florida, tomó clases de yoga por la ansiedad laboral. "Me hizo tanto bien que decidí capacitarme y enseñar a otros", comenta.
Casi dos años más tarde, enseña a tiempo completo y cobra 90 dólares por clase.
Los propietarios de viviendas ahora quieren personalizar su espacio de una manera única a través de murales por encargo.
Dagmar Vaught, una artista del mural en Lilburn, Georgia, se especializa en escenas y motivos para habitaciones infantiles. Aunque eso la mantenía ocupada, también ha recibido más solicitudes de murales de techo.
Le suelen pedir representaciones del cielo o el espacio para dormitorios, salas de juegos o cine, dijo Vaught. "El mercado de la vivienda se ha recuperado. Y por eso la gente se anima a agregar estas decoraciones".
Los murales de Vaught, que le llevan un promedio de dos días, cuestan entre 275 a 1,500 dólares.
"Los clientes vienen en ciclos. Algunos meses tengo cinco o siete murales comisionados por mes, otros sólo dos", apuntó. Pero en los últimos seis meses, su negocio ha subido 25%
El verano es la temporada de alquiler de brincolines y estructuras inflables.
Son cada vez más solicitados en carnavales, ferias callejeras y fiestas privadas.
Las búsquedas de este tipo de negocio se han disparado en el último año en la plataforma.
Rob Wright, propietario de Boing! Bounce Rentals en Springfield, no se sorprende. "Ya no es sólo para niños. Los adultos también los están alquilando como una diversión que no cuesta mucho", dijo.
Wright anota que las casas inflables son cada vez más elaboradas, algunas incluyen pistas con obstáculos y toboganes de agua. Alquila sus inflables por 200 a 600 dólares cada uno.
Para Wright, es un negocio de temporada. "Pero si tu negocio está en un lugar con clima cálido, puedes tener un negocio estable todo el año", dijo.
Deshacerse de las chinches es un trabajo desagradable, pero alguien tiene que hacerlo.
George Castillo, propietario de la empresa californiana de control de plagas Gorilla Pest Control, dice que las infestaciones de chinches son un problema grave en las grandes ciudades de Estados Unidos.
Y el problema está apareciendo también en ciudades más pequeñas. Eso podría explicar el aumento de la búsqueda de exterminadores en el sitio de Thumbtack.
"Está agravándose", advierte Castillo, quien recibe 25 llamadas diarias pidiendo sus servicios. Su empresa ha crecido de manera sostenida desde su lanzamiento en 2009. "La gente no entiende que no pueden deshacerse de las chinches con sus propios medios. Ese error empeora la situación."
Y deshacerse de los bichos no es barato. Castillo cobra entre 350 a 600 dólares según del tamaño del espacio infestado. Y tarda de una a cuatro horas en fumigar.
“Dicen que necesitas algo de suerte y trabajar muy duro para que un negocio tenga éxito… hasta ahora no hemos necesitado la suerte,” apunta.
Fuente: www.cnnexpansion.com / Por: Parija Kavilanz
